Observo el hombre y la mujer: imagen y semejanza de Dios desde mis argumentos personales

¿Qué es el pecado?

En palabras más sencillas sobre la definición de pecado, es hacer lo que queremos hacer cuando queremos hacerlo en lugar de hacer lo que Dios quiere que hagamos. Ósea, el pecado es cuando actuamos como nuestro propio dios en lugar de dejar a Dios ser Dios. (1 juan 3:4,5:17)

Es preocupante como en estos últimos tiempos las personas han perdido la conciencia del pecado, es más ahora como dice en la Palabra de Dios, a lo bueno llaman malo y malo lo llaman bueno, todo es relativo.

Por eso es importante que todos sepamos quienes pecamos y la Biblia es muy clara cuando dice que todos pecamos. ¡No hay excepciones! Cada ser humano peca y no está a la altura de la gloria de Dios.

Biblia también dice que a pesar que sabemos que algo está mal y lo hacemos eso es pecar. (Santiago 4:17).

Dios tiene aversión hacia el pecado, lo irrita, El odia el pecado, Dios siente esto porque él es perfecto y sin pecado, Él nunca ha pecado, Él es puro.

 El pecado además de ofender a Dios es un acto suicida es un acto que atenta contra uno mismo, nos va alejando poco a poco de Dios haciéndonos menos parecidos y la paga del pecado es la muerte, cuando peco estoy desobedeciendo la voluntad de Dios, y rompo sus leyes.

“Todo el que comete pecado quebranta la ley; de hecho, el pecado es transgresión de la ley”. 1 Juan 3:4

La buena noticia de todo esto es que Dios en su infinito amor tenía una solución para nuestro problema del pecado antes de que él hiciera la tierra. Dios sabía que íbamos a pecar, y él sabía que alguien tendría que pagar el precio de ese pecado. Por eso, envió a su Hijo, Jesucristo, a la tierra como un hombre para morir en nuestro lugar y pagar la pena que merecemos por nuestro pecado. Cuando aceptamos a Jesucristo como nuestro Señor y Salvador, Dios ya no nos mira y ve el pecado. Él nos mira y ve a su hijo sin pecado.

Dignidad humana desde la espiritualidad

Hoy en día la dignidad humana no es valorada mucho, pues nadie se respeta, pero todos merecemos lo mismo, cariño, tener un hogar, tener comida y además que nos amemos como hermanos.

Pero nadie quiere hacerlo y sigue irrespetándose; pero Dios no nos creó para eso, Él nos creó para que nos respetáramos, convivir en paz, nos creó a su imagen y semejanza.

En su Palabra nos dice: “8 En fin, vivan en armonía los unos con los otros; compartan penas y alegrías, practiquen el amor fraternal, sean compasivos y humildes” 1 Pedro 3:8

También encontramos en Gálatas 5:14 “ama a tu prójimo como a ti mismo” cuando Jesús nos dice que él nos ama a todos, nuestro deber es que, sin importar nuestras diferencias religiosas, tenemos que comportarnos como Jesús, pues todos somos creación de Dios.

 “12 Así que en todo traten ustedes a los demás tal y como quieren que ellos los traten a ustedes. De hecho, esto es la ley y los profetas.” Mateo 7:12.

Podemos mejorar estas situaciones aplicando algunos pasos sencillos, primero debemos pedirle a Dios que nos ayude a ejercer la paciencia que nos da por medio de su Espíritu Santo, para así ser tolerantes en todo momento y esta conducta llevara a los demás a que vean en mi lo que Dios puede hacer en nuestras vidas. Segundo, cuando se presenta una situación de intolerancia no debemos reaccionar de la misma manera, no está bien pagar mal por mal, Cristo nos enseña que debemos poner la otra mejilla, lo que debemos hacer es buscar ayuda de las personas que estén a cargo.

“De modo que se toleren unos a otros y se perdonen si alguno tiene queja contra otro. Así como el Señor los perdono, perdonen también ustedes.” Colosenses 3:13

Mi reflexión

Estuve impresionado porque no sabía casi nada del tema del pecado, me hizo tomar conciencia de mis pecados, que necesito a Jesús para que me ayude a ser menos pecador.